martes, 29 de septiembre de 2015

Gasolina (alta en octanos)

Sucesión de acontecimientos:

El pasado día 20 (septiembre de 2015) España vence a Lituania en la final del Eurobasket por un apabullante 80 – 63, liderado el equipo por Pau Gasol, con presencia en la grada de SM Felipe VI.

"Uve Palito lamenta haberse quitado la barba, pero sigue siendo capaz de sonreír"
"Reyes ambos"
"Cagüen-mi-manto. Chócala, ho"
"No te vuelvo a llevar a ver baloncesto. Pau es mío"

Antes del partido, en el periódico francés Le Monde, Clément Guillou firma un artículo, Les secrets de jeunesse de Pau Gasol (Los secretos de juventud de Pau) en que se trata de dar explicación al rendimiento del pivote, acudiendo a la relación con Nicolás Terrados, fisiólogo (vinculado con anterioridad al ciclismo). El diario Marca ya daba noticia de esta sinergia.

Sombras de duda (en forma de dopaje) empezaron a planear.

La reacción de Íñigo Méndez de Vigo, Ministro de Educación, Cultura y Deporte, fue fulminante y taxativa en sus términos. Era el 25 de septiembre.



“Pau Gasol es el alma de la selección nacional, un jugador de baloncesto que ha tenido un éxito extraordinario en la NBA, que ha paseado por todo el mundo el nombre de España y ha tenido, ahora mismo, un gran éxito en el Europeo de Baloncesto, y constituye un ejemplo para jóvenes españoles y del mundo; por ello, me parecen totalmente intolerables las insinuaciones de un bloguero en Francia sobre Pau Gasol y, por ello, esas insinuaciones las he puesto en conocimiento de la Abogacía del Estado y la Fiscalía, por si son constitutivas de delito, y para exigirle responsabilidades. Quiero decir también que en España se ha hecho un esfuerzo extraordinario en los últimos tiempos para luchar contra esa lacra que es el dopaje. La política del Gobierno es “tolerancia cero” contra el dopaje y, por tanto, no consentiremos ninguna insinuación en ese sentido”.

Lo que quiere decir (y dice) es que no se va a tolerar que nadie insinúe que Pau pueda haber hecho “puf”. Es intolerable.

*****

Ayer, día 28, las cosas estaban claras. Miguel Cardenal (presidente del Consejo Superior de Deportes, CSD) y José Luis Sáez (presidente de la Federación Española de Baloncesto, FEB) han anunciado que demandarán al bloguero (al que en El Mundo cambian el apellido como forma sutil de sugerir la forma de hacerle perder la cabeza). Se informa del fundamento jurídico (el artículo 7.7 de la Ley 1/1982, de 5 de mayo, “de protección civil del derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen”, pidiéndose una indemnización de un millón de euros, además de otras medidas de distinta consideración.

El hecho no constituye peccata minuta, o así se desprende de la cuantía de la indemnización.

*****

Para un lego, sorprende:

1 — La cerrazón implícita en plantear los términos como un enfrentamiento nacional y revanchista con los franceses (culpa suya, mon Dieu).
2 — La consideración apriorística de exculpar a Pau, convirtiendo la “tolerancia cero contra el dopaje”,  en “intolerancia frente a las insinuaciones de un bloguero francés”.
3 — La dificultad de identificar la intimidad personal y familiar de Instituciones como el CSD o la FEB.
4 — La propia cuantía y el destino del dinero en caso de que la resolución sea favorable.
5 — La coincidencia de que este párrafo esté redactado empleando la sangría francesa.

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Todo un sinsentido.

Una nueva muestra del deporte que cambia.


4 comentarios:

  1. Desde la batalla de Maratón queda claro que la mejor estrategia es matar al mensajero antes de que hable. Hacerlo después obliga a tomar medidas mucho más duras que el asesinato, como la de pedirle un millón de euros. Por no mencionar el efecto ponzoñoso derivado de dejar que se extiendan los efectos de la envidia de siempre que nos tienen los franceses: y no es para menos, pues si yo perteneciera a un país que ha inventado la sosería de una tortilla francesa y probara un día la tortilla española, juraría odio eterno a todo lo español.

    Esa es, sin duda, la razón que subyace en el discurso del bloguero, tan grave y turbadora que hace que el CSD o la FEB vean nacer en su interior una potente intimidad personal y familiar, con derecho a pedir protección a la legalidad internacional.

    Punto ese, el tercero, que era el mejor con mucho de los que has expresado, pero que por lo antedicho queda, ¡ay!, desprovisto de sustancia.

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    1. Reducir todo el asunto a una cuestión de "huevos" es una estrategia valiente, llena de razón y que, debo confesar, nunca se me hubiera ocurrido.

      Recuerdo aquella vez que comí unos langostinos cocidos, acompañados de una emulsión de huevos y aceite, estilo Mahón. Eso sí que es sustancioso.

      Gracias por el aporte, en pleno aperitivo.

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  2. Sí, fue muy extraño todo, aciertas en tus sorpresas y das en los clavos, como habitualmente. Abrazo.

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    1. Ya. Meterse con Mas o la CUP es una cosa, pero hablar de Gasol es otra.

      JJJ, ¡qué triste que haya que decir quién dijo algo para poder saber si estoy de acuerdo o no!

      Un abrazo, maestro.

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