11/09 — Etapa 01: (A) Irlanda
del Norte y (B) Gales
14/09 — Etapa 02: Glasgow (Escocia)
18/09 — Etapa 03: Resto de Escocia
25/09 — Etapa 04: Norte de Inglaterra (North East &
North West)
28/09 — Etapa 05: El Gran Manchester
02/10 —
Etapa 06: Merseyside
05/10 —
Etapa 07: Yorkshire
09/10 —
Etapa 08: Midlands (East & West)
16/10 —
Etapa 09: Este (East of England)
19/10 —
Etapa 10: Sudeste (South East England)
23/10 —
Etapa 11: Sudoeste (South West England)
26/10 —
Etapa 12: London ‘60s
30/10 —
Etapa 13: London ‘70s
02/11 — Etapa 14: London, los primeros ‘80s
06/11 — Etapa 15: London, el final de los ‘80s
09/11 — Etapa 16: London ‘90s
13/11 — Etapa 17: London, el nuevo milenio
Guía de la visita
Estamos
en Hampden Park, el estadio donde
actuarán los 25 representantes de Glasgow.
VIVA.
"Hampden Park" Foto: Simon Varwell |
Aquí
juega el Queen’s Park, el tercer equipo
en discordia de la ciudad, después de los dos grandes rivales del fútbol
escocés, Celtic (juegan en el Celtic Park) y Rangers (en el Ibrox Stadium).
Ninguno de ellos es el mayor estadio de Escocia. Ese honor recae en Murrayfield, el estadio en el que la
selección escocesa de rugby juega los
partidos del “Seis Naciones”, pero
está próximo a Edimburgo, la capital
del país, que visitaremos en la siguiente etapa. Así que, nos quedamos en Glasgow,
la mayor ciudad de Escocia y tercera
de UK, tras Londres y Birmingham, en
Hampden Park y evitamos “Old firm”,
la confrontación tradicional entre Celtic (uniforme de rayas horizontales
verdes y blancas, católicos y, en muchos casos, de extracción irlandesa, por lo
que se consideran independentistas en el asunto norirlandés) y Rangers
(camiseta azul, protestantes y unionistas, defensores de la integración de Irlanda del Norte en UK). Esta
rivalidad (que parecía no tener fin), se acabó el 14 de junio de 2012, tras la
desaparición del Rangers por sus múltiples problemas financieros.
Hampden
Park es un grandísimo estadio. De hecho, cuando se inauguró, el 31 de octubre
de 1903, era el estadio más grande del mundo y lo siguió siendo hasta la
construcción del estadio de Maracaná,
en Brasil, en 1950. Es idóneo para
acontecimientos deportivos. El Real
Madrid consiguió aquí dos Copas de
Europa.
18
de mayo de 1960:
Real
Madrid (7) [(1-1) Di Stéfano, min. 27 – (2-1) Di Stéfano, min.
30 – (3-1) Puskás, min. 46 – (4-1) Puskás, min. 56 – (5-1) Puskás, min. 60 – (6-1) Puskás, min. 71 – (7-2) Di Stéfano, min. 73]
Eintracht
Frankfurt (3) [(0-1) Kreß, min.
13 – (6-2)
Stein, min.
72 – (7-3)
Stein,
min. 75]
He
oído contar varias veces que, desde ese día, los taxistas de Glasgow no te
cobran la carrera si enseñas el carnet de socio del Madrid, en agradecimiento
por haber podido contemplar el que, para muchos, es el mejor partido de la
historia. Pero yo no recomendaría a nadie que se hiciera socio del club que
preside Florentino, para ahorrarse
el taxi. El metro de Glasgow es excelente —uno de los más antiguos del mundo;
dispone de una sola línea, circular, y siendo su nombre oficial Glasgow Subway, todo el mundo lo conoce
como Clockwork Orange (la naranja
mecánica, por el color de sus vagones)—. En cualquier caso, la organización
corre con todos los gastos de desplazamiento.
15
de mayo de 2002:
Real
Madrid (2) [(1-0) Raúl, min. 8 – (2-1) Zidane, min. 45]
Bayer Leverkusen (1) [(1-1) Lúcio, min. 13]
Fue
el día del gol de
Zidane y la entrada de Iker Casillas
para sustituir en la portería a César,
lesionado, y disputar los apasionantes últimos minutos de la final. El
entrenador era Vicente del Bosque.
Y
Hampden Park es especialmente adecuado para actuaciones musicales. Por eso lo
hemos elegido. Otros conciertos importantes celebrados en Hampden Park (antes
de la visita del UK 666 Tour) han
sido:
9/07/1990 — The
Rolling Stones
3/07/1999 — Rod
Stewart
7/07/2000 — Tina
Turner
8/06/2001 — Bon
Jovi
22/07/2001 — Eagles
4 y 5/08/2001 — Robbie
Williams
24/06/2003 — Eminem
27/07/2003 — Live & Loud ‘03
20/06/2004 — Live & Loud
‘04
21/06/2005 — U2
26/06/2005 — Live & Loud
‘05
29/06/2005 — Oasis
3/06/2006 — Bon Jovi
23/06/2006 — Eagles
25/08/2006 — The Rolling
Stones
1 y 2/09/2006 — Robbie
Williams
17/06/2007 — George Michael
6/07/2007 — Rod Stewart
23/08/2007 — Red Hot Chili Peppers
5/06/2008 — Neil Diamond
21/06/2008 — Bon Jovi
19, 20 y 21/06/2009 — Take That
30/06/2009 — AC/DC
4/07/2009 — Eagles
14/07/2009 — Bruce Springsteen
18/08/2009 — U2
16/09/2009 — Coldplay
20/06/2010 — Paul McCartney
26/06/2010 — P!nk
22, 23 y 24/06/2011 — Take
That
2/07/2011 — Neil Diamond
14/09/2012 — UK 666 Tour
Así
que estamos a punto de empezar. Si te apetece, te recomendamos visitar la Catedral y la Universidad, pero deberá ser después del concierto, que empezará
ahora mismo.
Glasgow (Escocia) (25)
Ser
considerado cantautor implica varias cosas. La primera, lógicamente, que hayas
compuesto las canciones que interpretas. Pero, más allá de eso, es necesaria
una actitud especial (que explica por qué nadie considera a Julio Iglesias o a Miguel Bosé como cantautores). En 1965, cantar sentado descalzo, en
la posición del loto, sobre una
alfombra hindú, con un pantalón de raso color fucsia y llevando la camiseta de andar por casa de Merlín el encantador, te da muchos
puntos para que te consideren como tal. La armónica puede considerarse un bonus, pero las estrellas pegadas en la
guitarra son un plus. Estoy
convencido de que el estudio donde Donovan
grabó la canción olía intensamente a patchouli.
Un
profesor en clase. En el inicio de los ‘60s —con la revuelta del rock ya en marcha y los titubeos
iniciales del estallido de The Beatles
y la visión ye-ye del mundo (en caso
de existir)— se pretendía reflejar, en el cine, los cambios sociales
implícitos. Si el profesor es negro —interpretado por un Sidney Portier que genera a su paso más conflictos (“Semilla de maldad”, “En el calor de la noche”, “Adivina quien viene a cenar esta noche”)
que Jessica murder Fletcher (Angela Lansbury)— el revuelo está
asegurado. En España, retitularon la película como “Rebelión en las aulas”. Ese cambio provocó que se desenfocara el
elemento más claramente subversivo: el encaprichamiento de la alumna por su
profesor. El tema no es novedoso, pero el acercamiento colorista supone un
avance notable, aunque el nuevo título hizo que el aliciente se diluyera
definitivamente para nosotros. El vídeo adjunto captura el momento en que la
canción aparece en la película y —se deja aviso para los impacientes— no se
empiezan a escuchar las primeras notas hasta 1:57 cuando,
en los títulos de crédito, empieza el tema interpretado por Lulu.
Marmalade — Ob-la-di, ob-la-da
Composición
de The Beatles, esta canción de aire
infantil (que narra la historia de Desmond
y Molly), fue el momento de
gloria de Marmalade. Su vestuario,
ciertamente empalagoso —Dean Ford,
cantante, lleva terno gris, camisa azul cyan
reflectante y pamela negra coronada por un foulard
rojo / Junior Campbell, piano,
camisola tricolor de manga corta / Graham
Knight, bajo, camisa blanca, pantalón verde pistacho, gafas redondas / Pat Fairley, guitarra, chaleco abierto
y camisa blanca con rayas rojas y azules / Alan
Whitehead, batería, traje beige,
pajarita king size—, queda eclipsado
por la irrupción inesperada de un armario con patas (que lleva puesta una
camisa mostaza y corbata estampada),
bailando desaforado en 0:39 y
ejecutando (nunca mejor dicho) un pase que debería conocerse como molinillo twist.
Middle
of the Road — Chirpy chirpy cheep cheep
Sally Carr (cantante), Ken
Andrew (batería), y los hermanos Ian
(guitarra) y Eric McCreadie (bajo)
actuaban desde 1967 como Part Four.
Más tarde cambiaron su nombre (Los
Caracas) y, con un estilo de música latina, se presentaron al concurso de
talentos de la TV UK, “Opportunity knocks”, que ganarían. Eso
no les supuso el éxito comercial y emigraron a Italia, donde se cruzaron con el productor Giacomo Tosti, que les ayudó a encontrar el refinado sonido que les
llegaría a caracterizar. Ya, como Middle
of the Road y con este “Chirpy chirpy
cheep cheep”, nos dan argumentos para desmontar un par de tesis aceptadas
con excesiva generosidad:
No todo tiempo pasado fue mejor (al menos en lo artístico) No todo lo que se presenta como novedoso, realmente
lo es. En España, mucho antes de “Operación
triunfo”, y todas las secuelas derivadas, tuvimos “Gente joven”, un programa que trataba de propiciar un efecto,
aquí, similar al descrito; recordar las categorías en las que se podía
concursar (canción ligera, canción española, canción lírica, folk, variedades y bailes regionales) da
una idea del caladero en que intentaba faenar. Dejo, por evidente, el
comentario de la coreografía, el vestuario o el peinado de los componentes del
cuarteto.
Al
Stewart — Year of the cat
Visto
restrospectivamente supone un riesgo asomarse a la fama anunciando algo
referido a un año. Puedes terminar atrapado —como Bill Murray—, aunque el actor americano tuviera peor suerte y le
tocara volver a sufrir ad eternum el
día de la marmota —otra vez—. Al Stewart
fue más afortunado liándose con un gato —ni triste, ni
azul— y con tesón y solvencia labrarse una sólida trayectoria de intérprete con
gusto. El vídeo mezcla muy oportunamente una interpretación en el programa de
la BBC “Old grey whistle test”, con tres películas clásicas: “Casablanca” (Michael Curtiz, 1942, Humphrey
Bogart e Ingrid Bergman), “Tener y no tener” (Howard Hawks, 1944, Humphrey Bogart e Lauren Bacall) y “Retorno al
pasado” (Jacques Tourneur, 1947,
Robert Mitchum y Jane Greer).
Un
genio de la discográfica alemana Hansa
escuchó la canción “Japanese boy” y
decidió cambiarle el nombre a la artista, para que adoptara su nuevo
personalidad oriental. Le pusieron un kimono, le pincharon un par de palillos
en la peluca, repartieron sombrillas (como las que ponen para adornar un Tequila sunrise) entre las aceleradas (y
minifalderas) bailarinas y se cargaron las posibilidades de que Mary Sanderman (la escocesa que estaba
detrás del apodo Aneka) pudiera
tener una carrera más larga, pues las canciones que presentó después (“Little lady”, “Ooh shooby doo doo lang”) eran con su verdadero registro vocal y
no se ajustaban a su personaje japonés. Así que, volvió a su nombre real, a
cantar en el estilo folk escocés que
siempre le gusto, y ahora sólo saca el atuendo para actuaciones privadas con su
familia en las que, con un poco de sake,
todos juntos desfasan felices recordando un pasado que no volverá.
B.
A. Robertson & Maggie Bell — Hold me
Ya
supongo que el abrázame que se piden B.
A. Robertson y Maggie Bell tiene
un componente amoroso, pero el aire cazallero de la canción me recuerda el
destilado del principio de Arquímedes,
descrito una vez por Bruno, y
apropiado para noches largas de beber en exceso. Arquímedes: “Dame un punto de apoyo y moveré el mundo”.
Bruno: “Dame un punto de apoyo y
conseguiré que el mundo deje de moverse”. Como Asturias ha asumido tener como himno al que antes era exclusivo de
los borrachos, se propone éste como alternativa para noches de comercio (y,
especialmente, bebercio).
Edwyn Collins (voz y guitarra) organizó Orange Juice y contó, para ello, con varios compañeros de faenas.
En 1982 eran tres —Malcolm Ross
(guitarra), David McClymont (bajo) y
Zeke Manyika (batería)—, con los que
alcanzaría su mayor éxito con “Rip it up”.
Para el vídeo, mezclaron imágenes del grupo en una nave espacial (más tarde se
les ve tocando superpuestos a la nave, con un incipiente efecto chroma), con un par de secuencias en las
que salían a la calle a hacer el memo. En la primera, se vestían de forma
extravagante, llevando, al tiempo, camisa hawaiana
y pantalón blanco, además de sombrero Panamá,
mientras saltaban y se comportaban como orates. En la segunda, entraban en un
bazar chino vestidos de hombre-rana, con gafas y snorkel puestos, mientras llovía en la calle. El obejtivo era que,
quienes les vieran, se rasgaran las vestiduras, pero ni de cerca lo llegarían a
conseguir.
Friends
Again — State of art
Cinco escoceses de Glasgow formaron Friends Again y, en 1983, tuvieron éxito con “State of art”. Eran Chris Thomson (cantante, guitarra
rítmica), Neil Cunningham (bajo), Stuart Kerr (batería), James Grant (guitarra solista, voces) y
Paul McGeechan (teclados). Para los
que vivimos esa época, recordar que el flequillo y la camisa remangada por
encima del codo eran tan modernos como los calcetines blancos, nos hace pensar
la cantidad de tiempo que pasó desde entonces. Tras un único LP, “Trapped and unwrapped”, Grant se
marcharía para formar Love And Money
—reclutando a McGeechan y Kerr—, Thomson organizaría The Bathers y, aunque tengo mis dudas, sospecho que no volvieron a
reunirse para ser amigos (otra vez).
Esta
canción fue compuesta por Siobhan Fahey,
de Bananarama y Robert Hodgens, de The
Bluebells. Primero la cantó el trío de chicas, sin demasiado éxito y, más
tarde, ligeramente remozada, el cuarteto de Glasgow, teniendo ellos un poco más de suerte. Siobhan y Robert
eran novios y transmitieron tan bien su sentimiento que, en 1993, la canción
seguía sonando igual de fresca y lozana y sirvió como fondo sonoro para un
anuncio del Volkswagen Golf que
relanzaría la canción y la llevaría al #1. ¡Ah, qué bonito sentirse joven de
corazón!
Los
años ‘80s supusieron una revolución musical (en una escena acostumbrada a tener
revoluciones cada tres cuartos de hora). Surgieron nuevas etiquetas (new wave, techno, new romantics),
pero también contemplaron el advenimiento de grupos que, aunque frescos e
innovadores en sus planteamientos, huyeron de la atracción fatalista de las
nuevas (entonces) tecnologías y descubrieron el tremendo atractivo del
clasicismo de una guitarra tocada de forma enérgica. Roddy Frame lideró Aztec
Camera. Tras un espléndido debut (“High
land, hard rain”), en la mejorable —pese a contar con la producción de Mark Knopfler— continuación (“Knife”) incluyeron un single en el que Frame se lanza rabioso
a rasgar una guitarra española. Luego la canción, en su deriva, se pierde
ligeramente, mientras el clip muestra
que todavía estaban dando los primeros pasos en el género y no se dominaban los
secretos del novedoso formato.
Jim
Diamond — I should have known better
Un
baladón. La típica canción para versionar en los programas de caza de talentos.
Emociones a flor de piel, interpretaciones intensas y gorgoritos. El ABC de OT.
La canción que Jim Diamond escribió
y cantó, le llevo al #1. Para no iniciados, debo avisar que, cuando llega a 1:36, no está
haciendo flamenco-fusión (no dice “ay-ay-ay...”),
sino que, al cantar en inglés, repite “I-I-I
... love you”).
Tres
canciones hubieran valido para representar a un favorito personal, la banda
encabezada por Jim Kerr, pareja de Chrissie Hynde (de Pretenders). Podía haber sido “Don’t
you (Forget about me)”, incluida en la banda sonora de la película de John Hughes, “The breakfast club” (rebautizada en España como “El club de los cinco” por el número de
alumnos que quedan castigados a ir al Instituto un sábado por la mañana y
descubrir la profundidad más allá del cliché
que aparentan). También pensé en “Belfast
child” (sobre la masacre del “Poppy
day”, el 8 de noviembre de 1987, en Enniskillen).
Pero me decanté por la energía vitalista de “Alive
and kicking” en el que, a pesar de empeñarse en actuar en lugares de alto
riesgo —al borde de un barranco, al lado de una cascada, delante del teclista
de mirada siniestra—, Kerr puede afirmar aliviado que sigue “vivito y coleando”. Eso es tener
suerte. La canción cuenta, además, con Robin
Clark como vocalista invitada.
Tomaron
su nombre de una canción de Steely Dan,
el grupo de Donald Fagen y Walter Becker, incluída en su album “Aja”. Eso ya es un punto a su favor.
Así que Deacon Blue, con Ricky Ross al frente (compositor y voz
solista), y el empeño en los coros de Lorraine
McIntosh, nos atrapan con el crescendo
rítmico de la canción y la emocionante historia de un barrendero que le cuenta
a Ross que está ahorrando todo lo que puede de su salario porque quiere
comprarse un barco al que llamará, no “Libertad”
(perdón, Perales), sino “Dignidad”. Wow.
Love
And Money — Strange kind of love
Tras la separación de Friends Again, James Grant montó Love And
Money, con sus excompañeros Paul
McGeechan y Stuart Kerr, más la
incorporación del bajista Bobby Paterson
(ex Set The Tone). En 1988, ya sin Kerr (reemplazado para la grabación
por Jeff Porcaro, de Toto), publicaron este single, que daría título al disco. El
tupé (y la actitud aparentemente altiva) de Grant, hacen que sea difícil
entender un tipo de relación, descrita por él, a la que no se pueda calificar
como extraña.
Escocia ha dado lugar a grupos que —sin que sea capaz de
precisar una explicación— mostraron
conexión (y simpatía) por la música que se hacía en USA. Del Amitri —con sus
guitarras, su gusto por las armonías y las letras cuidadas— fueron un ejemplo
de esa extraña conexión. Justin Currie
—alma mater del grupo, compositor,
letrista y vocalista— explica en un texto (enmarañado y complejo, pero
cautivador) la cantidad de cosas que pueden llegar a pasar cuando sientes que
nunca pasa nada.
Bobby Gillespie y Jim Beattie
trabajaban juntos en un proyecto inspirado por las líneas de bajo de Jah Wobble (PiL) y Peter Hook (Joy Division). Y eso, a pesar de que
Gillespie tocaba la batería en The Jesus
and Mary Chain. Tras diversos avatares (y ya tras la marcha de Beattie y el
liderato absoluto en manos de Bobby), les llega el éxito masivo con “Screamadelica” y “Give out but don’t give up”, del que salió este increíble “Rocks”. El inicio es deudor de Sly & The Family Stone y “Dance to the music” y el grupo muestra
claramente su inclinación hacia un sonido más americano y su atracción creciente por el baile.
Travis son buenísimos. Cuando cantaron esta canción, no
eran una banda invisible. Eran Fran
Healy (voz solista, guitarra rítmica), Dougie
Payne (bajo, voces), Andy Dunlop
(guitarra solista, banjo, coros) y Neil Primrose (batería). Es fácil
apreciar que les gusta el cine. Además de elegir su nombre por el personaje (Travis
Henderson) que Harry Dean Stanton
interpreta en la película “París, Texas”,
dirigida por Wim Wenders, en el
vídeoclip se reconocen diferentes influencias de películas clásicas. La más
evidente: la cena en “El guateque”
(con el picantón volador que Peter
Sellers hizo aterrizar en una diadema). También se reconoce a Julia Roberts en “Pretty woman”, o las escenas de las películas de Mack Sennett. Pero lo más sorprendente
es que el lanzamiento antológico de cefalópodo anticipa en cinco años a Davy
Jones, personaje de la serie “Piratas del
Caribe”. Eso justifica, con creces, el estropicio organizado por los
gañanes del clip.
Nacida
en Glasgow, Angela McCluskey se fue pronto a vivir a Londres, donde trabajó como publicista. En 1993, decide mudarse a Hollywood, USA, donde se casa y, en seguida, forma Wild Colonials. En 2004 publica su album de debut en solitario, “The things we do”, del que se extrajo “It’s been done”. Lamento no haber
podido encontrar un vídeo más interesante de esta canción (o de otras: “Know it all”, “Wrong side”), por lo que os dejo con uno de esos “inspiradores” que, particularmente, tan
poco me gustan.
Francisco Fernando era Archiduque de Austria, Príncipe Imperial de Austria, Príncipe Real de Hungría y Bohemia y, hasta su muerte, el heredero al trono austrohúngaro. Fue
asesinado en Sarajevo el 28 de junio
de 1914, lo que precipitó la declaración de guerra de Austria contra Serbia, el desencadenante de la Primera
Guerra Mundial. En alemán le llamaban Franz Ferdinand (y en su casa, “Frankie”, aunque el detalle no llegara
a trascender). Años después, daría nombre al grupo escocés que dejaría himnos
como este “Take me out”. Como detalle
sin importancia diré que, en mi primera visita a Mauritania, fue la canción que le puse a “mon ami” Mahmout en mi iPod (que miraba con curiosidad) y que
él sentenció diciendo, en su favor, que “era
muy rítmica”, mientras chasqueaba los dedos marcando el compás.
Isobel
Campbell & Mark Lanegan — Ramblin’ man
Isobel Campbell tocaba el cello
en Belle & Sebastian, hasta que
decidió dejar el grupo. Mark Lanegan
había colaborado en Screaming Trees
y Queens of the Stone Age y tenía
una trayectoria en solitario. En 2006 deciden colaborar en un disco, “Ballad of the broken seas”, del que se
extrae “Ramblin’ man” versión
actualizada del clásico del country Hank Williams. Me siento en la obligación
de avisar acerca de las imágenes del videoclip, ciertamente subidas de tono.
The
Fratellis — Henrietta
“Henrietta” se aburre como una mona en su fastuosa mansión. El
plasta de su marido desayuna ya con el móvil enganchado en la oreja y tiene
cara de sufrir acidez permanente. The
Fratellis la rondan y, cuando el marido se ha ido, ella les invita a
desayunar. John Lawler (top hat), Gordon McRory (pescador) y Barry
Wallace (descubierto) aprovechan para ponerse las botas y vuelven otra vez
a la calle con el estómago saciado. Henrietta
finalmente decide que quiere más y habrá huevos calientes (y revueltos) para
todos. Seguro.
Camera
Obscura — Let’s get out of this country
En
el tercer disco del grupo Camera Obscura,
—liderado por Tracyanne Campbell—, “Let’s get out of this country”, se
incluía una respuesta al clásico de Lloyd
Cole & The Commotions (“Are you
ready to be heartbroken?”) y, con 22 años de retraso, anuncian “Lloyd, I’m ready to be heartbroken”. No
parece que Tracyanne se agobie por demorar tanto una respuesta. Sin embargo, se
intuye que ha entendido más rápido que, cuando “intentas salir de tu país”, puedes encontrar a otros que tratan de
llegar al tuyo. La insatisfacción se encuentra en cualquier lugar donde haya
corazones rotos. Así que intenta ser feliz en el lugar en que te toque estar (o
remarás bajo la lluvia para siempre).
Belle
& Sebastian — Another sunny day
Un
grupo a la medida de su mentor y director espiritual, Stuart Murdoch. Tomaron su nombre del libro infantil de la autora
francesa, Cécile Aubry, cuyos
protagonistas, el niño de seis años, Sébastien,
y el perro de montaña de los Pirineos, Belle,
inspirarían también un serie de episodios para la TV francesa y de dibujos
animados japoneses. En cuanto al grupo, se les compara con The Smiths por la devoción con que les siguen sus fieles, y por el cuidado con el que
afrontan sus singles y LPs (“Tigermilk”, “If you’re feeling sinister”, “The
boy with the arab strap”, “Fold your
hands child, you walk like a peasant”, “Storytelling”,
“Dear catastrophe waitress”, “Push barman to open old wounds”, “The life pursuit”, “Write about love”). Fotos coloridas ilustran las portadas. Las
canciones están llenas de melodía y un regusto agridulce. La poesía sigue
haciendo pareja con la música. Una lástima que sea tan difícil encontrar sus
vídeos.
El
grupo que encabeza James Allan se
formó en 2003, aunque no grabaron su primer disco hasta 2008. No eran novatos,
pues se habían currado un montón de escenarios. Pero el éxito fue colosal y Glasvegas sustituyó a The Libertines y Arctic Monkeys como preferidos de “New Musical Express”, la influyente revista especializada en
música pop y rock. Casi nada.
025
|
1965
|
Donovan
|
|
026
|
1967
|
Lulu
|
|
027
|
1968
|
Marmalade
|
|
028
|
1971
|
Middle of the Road
|
|
029
|
1976
|
Al Stewart
|
|
030
|
1981
|
Aneka
|
|
031
|
1981
|
B. A. Robertson & Maggie Bell
|
|
032
|
1982
|
Orange Juice
|
|
033
|
1983
|
Friends Again
|
|
034
|
1983
|
The Bluebells
|
|
035
|
1984
|
Aztec Camera
|
|
036
|
1984
|
Jim Diamond
|
|
037
|
1985
|
Simple Minds
|
|
038
|
1987
|
Deacon Blue
|
|
039
|
1988
|
Love And Money
|
|
040
|
1989
|
Del Amitri
|
|
041
|
1994
|
Primal Scream
|
|
042
|
2001
|
Travis
|
|
043
|
2004
|
Angela McCluskey
|
|
044
|
2004
|
Franz Ferdinand
|
|
045
|
2006
|
Isobell Campbell & Mark Lanegan
|
|
046
|
2006
|
The Fratellis
|
|
047
|
2006
|
Camera Obscura
|
|
048
|
2006
|
Belle & Sebastian
|
|
049
|
2008
|
Glasvegas
|
Glasgow (25)
Próxima etapa — 18/09 — Etapa 03: Resto de Escocia
Han
confirmado que asistirán: Annie Lennox,
Texas, Emeli Sandé, The Waterboys
y Calvin Harris. Yo no me lo
perdería.
No te quedes
fuera. Reserva YA
Puedes
hacerlo (aunque el viaje esté iniciado):
1 — Dejando un comentario en el artículo,
2 — Enviando un correo electrónico a comunsinsentido@gmail.com o
3 — En la página UK 666 en
facebook (y dando un “Me gusta”).
me encanto la cancion de chirpy chirpy cheep cheep, no la conocia.
ResponderEliminarUn clásico de los primeros '70s
Eliminar!Para! !Para el tren! !Que va demasiado de prisa y no da tiempo de disfrutar el paisaje! Voy con la lengua fuera....
ResponderEliminarAlberto, con tu permiso, pienso dedicar 15 minutos en cada clase (de chavales y adultos) a un vídeo y una discusión sobre el artista y la época. Seguro que disfrutan a la vez que los adolescentes se vuelven un poco más eclécticos en sus gustos musicales.Entre los adultos va a provocar mucho debate.Y el nivel de inglés subirá cuanto más se calientan:).
Me he ido, confieso, después de los vídeos a escuchar entrevistas con algunos de los artistas(se llama "being side tracked")y me he enterado de mucho mas cosas.Pero claro, que si me bajo en alguna de las estaciones para hacer ésto y luego os ponéis en marcha sin avisar, pues me paso el tiempo corriendo por el andén.!!
Es difícil creer que algunos artistas escoceses lo sean , ya que el acento escocés es fortísimo. Algunos como Lulu o Donovan son MUY ingleses, sobretodo Donovan que parece de Hertfordshire, o Lincolnshire.Yo siempre creí que Donovan era irlandés..por el nombre supongo.
Nina
Encantado de que vaya a servir para algo útil (más allá del propósito inicial de entretener, que supongo que le valdrá a alguien y que es más necesario que útil).
EliminarPero, ahora que lo propones suena como una iniciativa pedagógica que se presenta llena de interés. Ya me dirás qué tal resulta.
En cuanto al ritmo: ya sé que es agotador (yo mismo lo siento así), pero ya conoces a los tour-operadores; nos obligan a programar viajes que implican necesariamente tomar unas vacaciones para descansar de las vacaciones que acabas de disfrutar.
Lo de las diferencias entre los acentos me sobrepasa: estoy en la categoría de los que sólo entienden el inglés cuando lo habla una persona para la que no es su idioma nativo.
Un saludo. Y gracias por tu iniciativa.
Mas vale tarde que nunca para este maravilloso viaje por. Scotland. Soy un enorme seguidor de la musica de allí sobre todo pop rock de la cual son maestros Bien por Jim Diamond esa balada siempre me puso KO (algún día hare algo con él) y los Bule Bells (otros indicutibles (.Disco que he regalado 3 o 4 veces). Busca discos de mckluskey Brothers son ellos y preciosos.. Marmalade los Hollis de Tierras Altas. Umm voy a volver a coger el tren
ResponderEliminarMe recuerda al comentario de un amigo que, hace nada, gritaba que había desconectado el GPS y aprovechaba para perderse y descubrir sitios maravillosos.
EliminarLa verdad es que, una vez concluido el viaje (que iba a velocidad de vértigo) ha ganado interés, pudiendo hacerse las visitas con más calma.
La música procedente de Escocia siempre me ha fascinado. Me quedo con tres grupos de esta etapa: Aztec Camera (me declaro rendido admirador de Roddy Frame), Del Amitri (tengo avanzada una entrada sobre un A-Z del grupo, que luego llevó a que la hiciera de Smiths o Blondie) y Belle & Sebastian (una entrada de Por Amor a la Música la dediqué a ellos).
Te espero. Gracias.