martes, 2 de octubre de 2012

Merseyside I (UK 666) (06-A)


11/09 — Etapa 01: (A) Irlanda del Norte y (B) Gales
14/09 — Etapa 02: Glasgow (Escocia)
25/09 — Etapa 04: North England (A) Nordeste de Inglaterra / (B) Noroeste de Inglaterra
28/09 — Etapa 05: (A) El Gran Manchester I / (B) El Gran Manchester II
02/10 — Etapa 06: (A) Merseyside I / (B) Merseyside II
05/10 — Etapa 07: (A) Yorkshire I / (B) Yorkshire II
09/10 — Etapa 08: Midlands (A) East Midlands / (B) West Midlands I / (C) West Midlands II
16/10 — Etapa 09: East of England (A) Este I / (B) Este II
19/10 — Etapa 10: South East England (A) Sudeste I / (B) Sudeste II / (C) Sudeste III
23/10 — Etapa 11: South West England (A) Sudoeste I + Isle of Man / (B) Sudoeste II
26/10 — Etapa 12: (A) London ‘60s I / (B) London ‘60s II
30/10 — Etapa 13: (A) London ‘70s I / (B) London ‘70s II
02/11 — Etapa 14: (A) London ‘80s I / (B) London ‘80s II
06/11 — Etapa 15: (A) London ‘80s III / (B) London ‘80s IV
09/11 — Etapa 16: (A) London ‘90s I / (B) London ‘90s II / (C) London ‘90s III
13/11 — Etapa 17: (A) London 00 I / (B) London 00 II / (C) London 00 III / (D) London 00 IV

Guía de la visita

El condado de Merseyside está situado en la región del Noroeste, en las dos orillas del estuario del río Mersey, incluyendo cinco municipios: Liverpool, Knowsley, St Helens, Sefton y Wirral.

La vida de todo el condado está marcada por la existencia de un río; aunque lo que verdaderamente determina la actividad es el puerto. El de Liverpool es el mayor del Reino Unido. Sus muelles han sido el centro del desarrollo de la ciudad. El más importante de todos sus muelles es el Albert Dock, cuya dársena forma un complejo que constituye el lugar más visitado de todo el Reino Unido, no ubicado en Londres. Incluye bares, restaurantes, tiendas y varios museos (Marítimo, Internacional de la Esclavitud, Galería Tate o The Beatles Story). Es el lugar que hay que visitar.

Una ciudad portuaria es, principalmente, un centro de comunicación. Muchos emigrantes y mucha gente nueva en la ciudad. Las posibilidades para el cambio están siempre presentes. Puedes irte. O puede que alguien nuevo (y distinto) aparezca en tu vida.

A los de Liverpool se les conoce como scousers, por el scouse, un guiso de patatas y verduras (con carne de cordero, en el mejor de los casos), típico de allí, que también dio nombre al dialecto empleado en la ciudad, consecuencia de la integración de distintos idiomas y culturas.

En fútbol, los enfrentamientos de los dos principales equipos, Liverpool FC (Anfield) y Everton FC (Goodison Park), se conocen como el Merseyside derby. En el hipódromo de Aintree se disputa el Grand National.

Quitando músicos y futbolistas, que el condado ha dado muchos, no he encontrado a demasiados personajes interesantes que reseñar. Tres: Rex Harrison (En “My fair lady”, haciendo de Profesor Higgins, se empeñaba en enseñar a Audrey Hepburn que la lluvia en Sevilla es una pura maravilla), John Parrott (jugador de snooker y vencedor en el Campeonato del Mundo en 1991) y Leonard Rossiter (actor, protagonizó la inolvidable serie de TV Caida y auge de Reginald Perrin).

Merseyside (17)

Gerry & The Pacemakers Ferry cross the Mersey

Compartieron manager (Brian Epstein), productor (George Martin) y procedencia con The Beatles. Pero compitieron tenazmente con ellos por el éxito (al menos al principio, antes del imparable despegue de J-P-G-R). Podía haber programado cualquiera de sus tres primeras canciones, #1 en UK (lo que no había conseguido nadie, y que no se repetiría hasta la aparición de Frankie Goes To Hollywood). Las tres fueron “How do you do it?”, “I like it” y You’ll never walk alone (basada en un tema del musical “Carousel” de Rogers & Hammerstein; se convertiría en la canción que los hooligans del Liverpool FC utilizaban para animar a su equipo y que, más tarde, se extendería a todos los clubs de fútbol). También podía haber programado su mayor éxito USA, “Don’t let the sun catch you crying”, múltiplemente versionada. Pero prefiero quedarme en la contradicción encerrada en el estribillo de la canción elegida, cuando. tras afirmar que van a coger el ferry para cruzar el río Mersey, deciden que “esta tierra es el lugar que amo y aquí me quedaré”, justo en el momento de mayor virulencia de la British invasion en USA. Son Gerry & The Pacemakers.

The Searchers Needles and pins

“Needles” son agujas y “pins” alfileres. No sé si, al juntarlos, se convierten en una frase hecha. Habría que preguntarle a sus compositores, Jack Nitzsche y Sonny Bono (la mitad del dúo Sonny & Cher). La canción fue originalmente grabada por Jackie DeShannon y, además de la versión de The Searchers, también se atrevieron con ella Cher, Tom Petty & The Heartbreakers (junto a Stevie Nicks), Willie DeVille y los Ramones.

The Beatles Something

¿Cómo hacer para elegir? Porque quedarse con una, supone renunciar al resto. Y, en este caso, el resto son un puñado de obras maestras; clásicos imperecederos que la mayoría de la gente asocia a momentos importantes de sus propias vidas. En mi caso, presento tres argumentos que me gustaría se entendieran como tres formas de pedir perdón: 1 – Una licencia absurda de mi época en la radio y mi querida La Puerta del SOUL, cuando en el programa dedicado a versiones desde el soul, decidí empezar con “algo” de The Beatles. 2 – Escrita por el más discreto del cuarteto, George Harrison. 3 – La etapa en que estuvieron menos fashion (vistos hoy), en un vídeo en el que muestran su verdadera situación (separados como grupos y atrapados por sus parejas: Pattie Boyd, Yoko Ono, Linda Eastman y Maureen Cox). Tres razones antiépicas para recordar la poesía y el lirismo de unos magos inmortales.

John Lennon Imagine

Dotado de un talento asombroso, John Lennon tuvo la oportunidad de explorar todas sus posibilidades en una vida trufada de éxitos, hasta que —truncada por un trastornado coleccionista de autógrafos, Mark David Chapman— le supuso una promoción (por elevación) al parnaso de personas memorables. Su canción “Imagine” —ensalzada como un himno— resume las esperanzas de una generación que —tras conseguir viajar sin moverse del sitio, pedir lo imposible o dar oportunidades a la paz— creyeron que limitar la imaginación era caer en un contrasentido que era necesario superar. Su status como despertador de conciencias se confirmó, más allá de toda objeción posible, en la ceremonia de clausura de los JJ OO, contemplando la reacción del público ante la exhibición de este vídeo.

Ringo Starr Photograph

Ringo Starr puede considerarse un tipo con estrella. Aterrizó en el grupo más legendario de la historia de la música y aprovechó con descaro la fortuna que se le presentó de forma inesperada. Terminado el conjuro (porque se disolvió el invento) disfrutó de poder catar, en “Caveman”, a Barbara Bach que —además de lucir acorde a su nombre— fue la troglodita más apetitosa imaginable. Así que, de vuelta de todo, Ringo canta una canción apropiada para tomar al asalto el escenario con una pandilla de amigotes ebrios y cantar (con voz rota) poniendo entusiasmo en el empeño. La coleta y las gafas de sol transmiten la sensación de que no es la primera vez que él hace algo así.

The Real Thing You to me are everything

En 1976 The Real Thing consiguieron un colosal éxito, con este “You to me are everything”, probablemente el mayor del soul vocal británico, superando a Sweet Sensation. En este caso, las influencias son claras: la producción de Kenny Gamble y Leon Huff para el sello PIR (Philadelphia International Records) que, explicado rápidamente, significa armonías vocales sobre lecho de ambientación orquestal, con predominio de violines. Tampoco te pongas así, Ferrán Adriá dice “salsa de huevo, estilo Mahón y todos tenemos que entender que quiere decir mayonesa. Vale, fíjate entonces en los modelitos, de izquierda a derecha: 1 – traje de raso color zanahoria, 2 – pantalón gris pata de elefante y chaqueta beige sin nada debajo, 3 – pantalón peto de terciopelo marrón y camiseta blanca de manga corta y, 4 – el que toca la guitarra escogió un catsuit, con tirantes y pata ancha, de color dorado. ¡Ah! El bigote al estilo del que lucía Ted Lange (Isaac Washington, “su camarero”, en “Vacaciones en el mar”), hacía furor esa temporada. Una “newsboy cap” es un remate excelente.

George Harrison Blow away

Mis hijos me preguntan en ocasiones por mis preferencias. Por su edad, asumo que lo hacen para apropiarse de mis decisiones, aunque, cada vez está más próximo, llegará cuando lo hagan para poder contradecirme. Así que, por el momento, cuando me plantean “¿cuál es tu beatle favorito?”, sigo inalterable explicando que es George Harrison que, en su día, escogí para llevar la contraria a todos y que, con el paso del tiempo, he ido encontrando argumentos “adultos” con los que respaldar esa elección. Su impuesta discreción, asumiendo su papel secundario con resignación, su clasicismo estético, su búsqueda de raíces y su recuperación de la legendaria figura de Roy Orbison, orquestando junto a él y a Tom Petty, Jeff Lynne y Bob Dylan, el supergrupo Traveling Wilburys. Para elegir una canción que lo represente, me decanto (frente a la más obvia “My sweet Lord”) por un “Blow away” que tuve en formato single y que sonaba en todos los guateques que organizábamos con la pandilla, aprovechando las escapadas de los padres incautos. La adaptación de las costumbres al paso del tiempo (y de las modas) no impide que su esencia permanezca identificable.

The Teardrop Explodes Reward

El grupo liderado por Julian Cope, The Teardrop Explodes, estuvo a caballo entre décadas (1978-1982). Se le etiquetó de post-punk o neo-psychedelic que, si quiere decir algo, básicamente es que trataron de encontrar un sonido propio (pero no llegaron a alcanzarlo). El vídeo apunta un comportamiento totalmente demodé, con un jeep abarrotado de ocupantes, sin cinturones, ni ninguna otra medida de seguridad —obviedad para quien haya (sobre)vivido ese tipo de conductas—. Para redondear el efecto, a la española, hubieran tenido que, dejar de tocar tantos vientos, y dedicar su escaso tiempo a marcarse unas boyas.

Orchestral Manoeuvres in the Dark Enola gay

Hubo un tiempo en que el nombre de este grupo, formado en la península Wirral, era un completo enigma para mí. Luego comprobé que también lo era para ellos —Andy McCluskey (voz, guitarra), Paul Humphreys (teclados), Martin Cooper (saxo) y Malcolm Holmes (batería)— que, apremiados por su discografía, se vieron empujados a convertirlo en el acrónimo OMD, más breve y fácil de recordar —y precisamente por eso, menos memorable—. Pero, con el paso de los años llegaría a comprender la maniobra orquestada oscuramente por un émulo del [falso] Mago de Oz: el siniestro afán de bombardearnos a todos con ruidos —menos destructor que Little boy, la primera bomba atómica lanzada sobre Hiroshima, el 6 de agosto de 1945, desde un bombardero B-29 Superfortress, bautizado Enola Gay en nombre de la madre del piloto, Paul Tibbets— pero absolutamente desesperante y omnipresente.

A Flock of Seagulls I ran (So far away)

Una jauría de perros. Un enjambre de abejas. Una colonia de hormigas. Los leones se agrupan en manadas, los peces en bancos (o cardúmenes) y los cerdos en piaras. Las ovejas se juntan y forman rebaños. Los humanos, cuando lo hacen, se convierten en multitudes. Los corales, en arrecifes. Ten cuidado con las estampidas de los búfalos, con una plaga de langostas, o con la marabunta. Las aves de corral crían a sus pollos en parvadas. Si tienes muchos caballos, has formado una cuadra. Juntando a muchos perros de caza, para una montería, has armado una recova. Para transportar carga, deberás organizar una recua de mulas y, si las llevas atadas formando un tren, se convertirán en una reata. Los cabestros que se emplean en las tareas con los toros, se agrupan formando una parada. Y los pájaros forman bandadas. Incluso aunque se trate de gaviotas, ese animal extraño (“rata que vuela”), cuyo guano tiene propiedades antimiméticas (cagando blanco, se convierte en marrón al caer sobre un muro recién encalado) y a quien Richard Bach dedicó uno de los primeros libros de autoayuda, éxito de ventas en los ‘70s, que propiciaría una película homónima a quien Neil Diamond puso banda sonora (“Be”). El título era, por descontado, “Jonathan Livingston Seagull” (Juan Salvador Gaviota en la versión española). Tanto rollo para terminar viendo el vídeo y descubrir que A Flock of Seagulls son, más que una bandada de gaviotas, una panda de palomos (cojos), a quienes cuesta echar a correr y escapar cuando se sienten acosados (por mujeres).

China Crisis Working with fire and steel

Imagino que muchos estamos hartos de oír hablar de la crisis, de su origen, de sus causas, de echarse la culpa unos a otros, tratando de escurrir el bulto y, sobre todo, olvidando que, de tanto empecinarnos en repetir nuestros fracasos, nos empeñamos en ir poniéndonos piedras (no sólo chinas, a veces son enormes pedruscos), con los que volver a tropezar. En 1983, este grupo, que eligió el nombre de China Crisis, explicaba las consecuencias de trabajar en la siderurgia (“con fuego y acero”), en un sector que, a consecuencia de la reconversión industrial motivada por la crisis del petróleo de 1973 (la que Supertramp preguntaba, “...what crisis?”), había visto la reducción del empleo (que llevó a un proceso que, en Sheffeild, fue dramático, como bien mostraba la película “The full monty”). Bien, para hacerlo, ponía imágenes de la crisis consecuencia del crack del ’29 y la evolución de la industria en el siglo XX y poder así comprobar que todo seguía igual. Yo soy antisistema, ¿y tú?

Frankie Goes To Hollywood Relax

Se les pretendió descalificar otorgándoles la etiqueta de prefabricados, en la idea de que eran un producto que sólo pretendía obtener el éxito comercial —como si el hecho de que vender fuera implícitamente malo—. Lo cierto es que sonaban de maravilla y “Relax”, el primer lanzamiento de Frankie Goes To Hollywood, sigue manteniendo el tipo como representación de lo que supuso la música de baile en los primeros ‘80s. Para el lanzamiento del grupo (y de su primer single) se recurrió a la provocación, lo que consiguieron con holgura, alcanzando el #1 en listas UK con sus tres primeros discos (después de “Relax”, llegarían “Two tribes” y “The power of love”). El vídeo original (censurado en UK, como la canción), fue dirigido por Bernard Rose y muestra al cantante, Holly Johnson, en actitud provocadora, al acudir a un club de ambiente, de los que los asistentes entienden (en la terminología de la época), vestido de traje y corbata (a quién se le ocurre) en una sesión dominada por la imaginería gay y BDSM, con chicos musculados vestidos de cuero y latex, una drag-queen rubia y un obeso envuelto en una toga, simulando ser un Emperador de Roma. Un tigre anda suelto y la actitud de Holly parece que es la de buscar pelea. Extraña forma de relajarse. Para los escrupulosos, adjunto la segunda versión del vídeo, más tradicional (con el grupo simulando participar en una actuación) y dirigido por Godley & Creme.

The Pale Fountains Palm of my hand

A principios de los ‘80s en “Radio Asturias”, la hermana pequeña de la “SER”, emitía (en FM) desde el paraguas de “Los Cuarenta principales”, programas de factura propia, aprovechando la oportunidad que ofrecía la desconexión regional. Aquello fue un semillero de creatividad. El programa nocturno de Enrique Bueres, “El expreso de medianoche” (contenedor imprescindible de actualidad musical y cultural, al margen del concurso de maquetas), “Bandidos y mulatas”, de Ángel González (especialido en rastrear las raíces de la música negra que se hacía entonces) y “Vinilo de colores”, de Rico Roces que eligió (si no recuerdo mal) esta canción como sintonía, “Palm of my hand”, de The Pale Fountains. El grupo orquestado en torno a Mick Head dejó dos LPs y, de tanto escucharlos, conozco ambos como la palma de mi mano. Son “Pacific street”, de 1984 (donde se incluiría le versión que un año antes se había editado como single) y “...from across the kitchen table”, de 1985. El productor era Ian Broudie, que más tarde alcanzaría la fama con su propia formación, The Lightning Seeds. Cuántos recuerdos tratando de documentar aquella época...


“Me haces girar, me haces bailar, me haces dar vueltas como un trompo. Me das la vuelta, como a un disco. Me haces entrar en barrena, me vuelves del revés, como a un disco”. Es la traducción, mucho más que libre, del contenido de la canción de Dead Or Alive, el conjunto liderado por Pete Burns. Practicaban un estilo que se definió como Hi-NRG (alta energía), en el que también destacaban Donna Summer, Tina Charles, Evelyn Thomas o Bananarama. Claramente orientada hacia el baile, era un tipo de música disco. En el vídeo se aprecia la capacidad para transformarse de Burns, poniéndose un kimono, un parche en el ojo o convirtiéndose en una nueva reencarnación de Vishnu. Pero su búsqueda de la transformación siguió más allá, como puedes comprobar en este reportaje. Aquí tuvimos a La Veneno; allí a Peter Burns. Viva o muerto.

The Icicle Works Birds fly (Whisper to a scream)

Ian McNabb puso un anuncio buscando alguien para montar un grupo, al que respondió Chris Lahye y al que pronto incorporaron al batería Chris Sarrock. Se llamaron The Icicle Works, por la historia corta de ciencia-ficción, escrita por Frederick Pohl (titulada “The day the icicle works closed” e incluida en el recopilarorio “The man who ate the world”). Practicaron un estilo al que se llamó neo-psicodelia, en el que también estuvieron Echo & The Bunnymen y The Teardrop Explodes. Este tema —así, o con el título invertido “Whisper to a scream (Birds fly)”— fue su mayor éxito, transformando el susurro inicial en un verdadero grito.

Echo & The Bunnymen The killing moon

Este grupo liderado por su carismático cantante, Ian McCulloch, tuvo su mayor éxito con esta canción, “The killing moon” que aparecía en la película Donnie Darko. Además de Echo & The Bunnymen, se escucha a Gary Jules con su celebrada versión de Mad world, de Tears For Fears. Una banda sonora irrepetible.

Paul McCartney No more lonely nights

El paso de los años le ha convertido en el miembro de The Beatles que menos simpatías despierta, atrapado en la doble desgracia de mantenerse vivo (y activo). Para quienes vean a Paul McCartney tan viejo (y que John Lennon se mantenga tan joven), quizá sea preciso recordar que John nació dos años antes que Paul (y que, trágicamente, murió hace casi 32 años). George Harrison también falleció. Y Ringo Starr... No sé, el bueno de Ringo, es simpático y eso, pero nunca fue el más productivo del cuarteto. Así que, claro, ver a Paul, haciendo cosas, con 70 años —seis más de aquellos para los que escribió una banda sonora imaginando lo que sería envejecer— y es fácil caer en la tentación de apreciar que su compromiso ya no es el mismo.

141
1964
Gerry & The Pacemakers
142
1964
The Searchers
143
1969
The Beatles
144
1971
John Lennon
145
1973
Ringo Starr
146
1976
The Real Thing
147
1979
George Harrison
148
1980
The Teardrop Explodes
149
1980
Orchestral Manoeuvres in the Dark
150
1982
A Flock of Seagulls
151
1983
China Crisis
152
1983
Frankie Goes To Hollywood
153
1983
The Pale Fountains
154
1984
Dead Or Alive
155
1984
The Icicle Works
156
1984
Echo & The Bunnymen
157
1984
Paul McCartney

Dentro de nada, el segundo tramo de la etapa dedicada a Merseyside. Al completar la etapa, se entregará el resumen por localidades.

Próxima etapa — 2/10 — Etapa 06-B: Merseyside II

Estarán The Boo Radleys, The Lightning Seeds, Rick Astley, Black y The La’s.

¿No te gustaría tener un asiento exclusivo (y numerado) para ti?

Reserva YA

Puedes hacerlo (aunque el viaje esté iniciado):

1 — Dejando un comentario en el artículo,

2 — Enviando un correo electrónico a comunsinsentido@gmail.com o

3 — En la página UK 666 en facebook (y dando un “Me gusta”).

4 comentarios:

  1. Marsha Ambrosius tiene un físico diferente, un corte de cara y rasgos extraños, la mezcla de un padre griego y una madre negra(británica). La voz también tiene un timbre diferente que a veces me gusta y otros no.Le seguia en Floetry y alguna vez en un Club de Londres(Jazz) le he visto y escuchada con ese toque de soul y Jazz que tiene. Diferente es, es como hiciera arte dentro del arte de cantar.
    Ella y la Spalding están en un "nicho" original y tienen muchos seguidores. Ni he comprado discos ni me sacaría de casa para ir a un concierto. Si ceno en Londres y después se tercia ir a un club a escucharla porque lo sugiere alguien, sí.

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    Respuestas
    1. A mí me gustaba mucho Floetry; creo que sonarán también en el viaje.

      Spalding, imagino que es Esperanza, pero ella es USA y no estará en esta lista.

      Lo de cenar y después ir a un espectáculo, como has contado, es la base de una de mis últimas teorías que, este viaje, no me ha permitido exponer; tendré tiempo para hacerlo.

      Un beso.

      Me alegro que te esté interesando la propuesta.

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  2. Yo no soy de los Beatles ni de los Rolling sino de Queen(y sobretod de Freddy mercury), U2, Prince,Dire Straits, y otros etc.
    Sobre lo Beatles se puede discutir mucho en cuanto a las voces (creo que otros artistas cantan, cantaron, han cantado sus canciones muchísimo mejor que ellos mismos, con arreglos mejores de música tb.Es verdad que Ringo Star nació con una flor en el culo,no sabía él, Sí sabía!! la suerte que tuvo en toparse con esos muchachos. No tenía ritmo alguno. Sin embargo, Los Beatles marcaron una época,provocaron un cambio en la sociedad y sus canciones.... las letras tenían siempre un mensaje para cada uno de las personas que les escuchaban (y escuchan). Eran mágicos en este sentido y un pozo de creatividad.Difícil seleccionar una sola canción, como bien dices.
    Un beso
    Nina

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    Respuestas
    1. Como bien dices, el efecto que produjeron los Beatles es difícil de asimilar por completo. En primer lugar, colectivamente supusieron el punto de apoyo para una palanca que movería toda la conciencia occidental: un verdadero terremoto. Y en lo individual, casi cualquier persona puede encontrar claves de cómo condicionó su vida, cómo la cambió o recuerdos personales asociados a algunas de sus canciones.

      Pero, yo a estas alturas, sólo me declaró seguidor de ella y de mis hijos. De los demás, hay cosas que me gustan, pero sentirte obligado a tener que elegir definirte de los Beatles, o de los Stones, o de Queen, o de los Tres Sudamericanos, como que no me apetece nada.

      Besos.

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